Ir al contenido principal

Mermelada de naranja y más

                                                                                                                                           


Hoy os traigo una preparación de la que podemos decir, aunque es por todos conocida y familiar en nuestra mesa, que no hay, seguramente, dos recetas iguales. Además, es una preparación que merece un lugar destacado en la cocina mediterránea, pero sobre todo, en la cocina tradicional de la Vega Baja, en donde se extienden los huertos de naranjos, de un verde intenso, compitiendo unos con otros por ver cual tiene más preñadas sus ramas de estos frutos maravillosos que son las naranjas.




Suelo hacer mermeladas cuando tengo excedente de frutas, no en una época concreta. Ahora, después de estas Navidades de “he comido tanto que no me entra la fruta”, los cestos de la cocina están llenos de naranjas, de un par de variedades: unas son de mi huerto y otras, Joaquín, mi apreciado y recién estrenado jardinero, me las trajo. Él me dijo: “Le voy a traer yo unas naranjas, que eso sí que son naranjas”.
A buen entendedor, le será fácil considerar que Joaquín no cree que las mías, ecológicas y naturales cien por cien, por tanto algo pequeñas y esmirriadas, sean muy buenas a pesar de todo.

La cuestión es que justo esta semana mi despensa requiere que hagamos mermelada, así que en eso estamos.





A quien le guste la mermelada suave y delicada, que entra sin que apenas te des cuenta y que sirve para todo y gusta a todo el mundo, sepa que esta no es su receta, porque esta es una mermelada con carácter, algo rústica y con personalidad propia.

Tiene poca cocción, porque creo que en la cocción de las mermeladas se va todo su sabor y propiedades. Eso hace que encontremos algunos tropezones duros, que hay que masticar, sobre todo las tiras de piel. Una delicia a mi paladar.
También tiene menos azúcar que las recetas estándar de mermeladas, lo que le deja un punto ácido que en casa nos encanta.

En fin, enseguida veremos la receta, pero quede la advertencia de que si eres muy sensible, te puede provocar un respingo en la silla, porque te aseguro, que es una mermelada cuyo sabor no te deja indiferente.

Aquí van los ingredientes:



Naranjas
Azúcar
Limón




Y así se hace:

Pelamos las naranjas con cuidado, quitándoles toda la piel blanca que podamos.






Las partimos en trozos quitándoles las semillas en el caso de que tengan.



Hacemos una juliana con unos trozos de piel, no demasiado. Hay que tener en cuenta que por muy bien que limpiemos la piel, amargará un poco.
Exprimimos el limón sobre la fruta.





En total obtuve unos tres kilos entre carne y piel de naranja.
A esta cantidad decidí poner 1.800 gramos de azúcar. Esto no es regla exacta en mi caso, suelo poner una proporción así, aproximada, algo más de la mitad del peso de la fruta.





Y al fuego, en una cacerola amplia en la que quepan bien los ingredientes.




Enseguida que se calienta, el azúcar empieza a disolverse y la naranja empieza a desprender sus jugos, quedando todo con mucho líquido.
Dejaremos cocer, a su tiempo, tranquilamente, removiendo de vez en cuando.





El preparado irá tomando textura y un precioso color dorado. En este caso, con esta cantidad de fruta, ocurrió aproximadamente a la media hora o cuarenta minutos.

Pero antes, cuando todavía la proporción de líquido es grande, extraigo uno o dos vasos del mismo. Esto es lo que llamo jalea de naranja y que utilizamos como si fuera miel, una miel aromatizada que está riquísima y nos sirve para endulzar yogures o pasteles o simplemente para tomar a cucharadas, como hace mi hija pequeña.

La puse en un cazo aparte y le di unos minutos de cocción.





Ahora sí, volvemos a la textura de la mermelada, que se ve en su punto. Hay que tener en cuenta que al enfriar, espesará un poco.

No hay tiempos fijos ni reglas, pero sí nuestros propios truquis. El mío es que cuando paso la cuchara atravesando la cazuela y se deja ver el fondo durante un segundo, considero que está.





Apagamos el fuego y enseguida, en caliente, rellenamos los tarros previamente esterilizados.





Me gusta rellenar tarros de diferentes formatos, incluso estos pequeños tarritos para degustación.

Finalmente, ponemos todos los tarros boca abajo y los dejamos toda la noche.






Preparamos los detalles del etiquetado y acabado. De las mismas fotos que he obtenido, saco unas pequeñas copias con el texto: Mermelada de naranja y Jalea de naranja, pues me han salido dos tarros de ésta última.


A la mañana siguiente:






Etiquetamos y ponemos unos aros de papel de seda en este caso, sobre todo para que nos sirva de precinto, pues a veces abrimos más de un tarro a la vez sin darnos cuenta.








La jalea ha quedado con un color muy bonito y apetecible.


Y es la hora de probar. Nunca queda exacto el relleno de los tarros, así que siempre hay un pequeño recipiente para probar.




Dorado y brillo perfecto


Textura y tropezones en su punto



Una mermelada casera con un gusto delicioso




Una golosina.



Desayunemos mientras os enseño otra cosa.



Este año renuevo mi proyecto con el huerto. Después de un descanso de dos o tres temporadas, vuelvo a la carga.

Mi problema últimamente era: por una parte los perros, que no hay forma de que dejen títere con cabeza.
Por otra parte, las pequeñas plagas de un huerto no tratado, que hacían que comieran ellas y ellos, esos pequeños bichitos como tijeretas, hormigas y demás, más productos de la tierra que nosotros.

No quiero tratar el huerto con productos agresivos ni contaminantes, así que hay que ingeniárselas.
La solución la encontré en unos cajones de cultivo. Apicius tenía un excelente reportaje en su blog sobre huertos ecológicos que me animó muchísimo. El hecho de que los cajones estén en alto, paliará mucho el destrozo de los perros y por otra parte, se hace más cómodo y más controlable, tanto las hierbas como las plagas y hormigueros, o al menos eso creo. De modo que ese era mi proyecto. Sin embargo, los cajones de cultivo hechos expresamente, son caros y había que buscar alternativas.

Cerca de casa hay un lugar en donde venden palés y otros objetos de madera. Allí encontré estos cajones por un módico precio y aunque no son de cultivo, me van a servir perfectamente.

No me digáis que no son ¡Una chulada!





Cuatro cajones de 120 por 120, que se elevan sobre una especie de palé y que hemos enfilado junto a la valla, dejando un pasillo para poder arreglar en un futuro las plantas por ambos lados.

El problema en principio era la separación entre las maderas, porque aunque ahora se ven bien cerrados, antes eran con maderas separadas. Pedí que me los cerraran y lo hicieron a un precio muy razonable.
Ahora todavía hay que forrar por dentro para evitar que la tierra y el agua de riego, se escapen por entre las maderas, así como para evitar en lo posible que la madera se pudra.

Desde luego estos no son como los cajones de cultivo que están bien preparados para toda contingencia, esto es un apaño económico, pero que me servirá ya veremos cuantos años.




Encontré un material de una especie de rafia, con el que se hacen ciertos techados. Con esta tela forraré por dentro los cajones.
En el fondo pondré tres o cuatro dedos de grava fina que tengo de un resto de alguna cosa y que servirá para aportar un buen drenaje a los cajones.




Luego rellenaré de tierra del huerto, porque mi huerto no ha sido tratado al menos durante más de 30 años y esa tierra es fértil y rica. Tiene además lombrices y otros organismos muy beneficiosos, así que esa es la tierra que quiero para mis planteles.




Estoy tan contenta, que estaba deseando compartirlo con todos vosotros.

En estas pilas de neumáticos, plantaremos las patatas según un sistema que Mariano Bueno enseña en su libro “El huerto familiar ecológico”.





Y en tierra directamente, plantaré los tomates y las calabazas. Ya veremos si sobre dos sostenes en tijera y media canal atravesada con algo de tierra, puedo plantar fresas cuando llegue su tiempo. Os iré informando de los progresos.

Vamos, como una niña con zapatos nuevos, siento que los Reyes Magos me han traído un gran regalo.




La tierra es agradecida, quizás nos debiera enseñar a serlo también a nosotros. Con un poco de cuidado y algo de mimo, nos devuelve mil por una.

Hace muchos años inicié mi experiencia buscando ejercitar mi paciencia con las plantas, esperar a que las semillas germinen, a que las plantas crezcan y den su fruto, me parecía imposible. Pero la tierra me enseñó.
He tenido tantas satisfacciones, que ahora creo que no lo podría dejar. Plantar cualquier cosa y seguirla, es como asistir al milagro de la vida en primera fila y eso, es realmente muy bonito.

Nos vemos amigos.





Comentarios

  1. La mermelada me parece una delicia, además la mermelada de naranja es una de las mermeladas que más me gusta. ¡Qué envidia hacerla con esas naranjas!.

    Sobre los huertos elevados nosotros tenemos el mismo problema en la casa del pueblo de mi padre pero no con los perros, sino con las raices de un chopo que curiosamente es el árbol más alto de la localidad y que no podemos cortar, así que sus raices se lo llevan todo por delante. Un problema gordo el que tenemos porque al no estar allí las raices estrangulan todo lo que nazca en las zonas húmedas y en cuestión de días las raices traspasan los surcos hechos alrededor de estas estructuras para más protección.

    Hemos puesto huertos elevados cerrados para cultivos puntuales y tiestos gigantes para los groselleros, así que te entendemos perfectamente que estés contenta... te va a dar la vida experimentar de nuevo.

    Un saludo.

    ResponderEliminar
  2. No me he animado yo con la mermelada, y viendo los resultados que obteneis es cuestión de ponerse e intentarlo.

    Estupenda la explicación.

    Saludos

    ResponderEliminar
  3. Viena querida , esa mermelada se ve deliciosa. Hice en un par de oportunidades mermelada de naranjas y es realmente buena. Ya me dio antojos :))
    Exceletne idea para tu huerto. Que lo disfrutes mucho.
    un besote,

    ResponderEliminar
  4. Viena, me encanta poder intuir en tí esa alegría de tu huerto. No es para menos. Yo, que ahora no tengo huerto, parece que me falta un brazo.Ya estoy planeando lo que voy a sembrar cuando vaya a mi casa en semana Santa porque así cuando llego en Junio, ya recojo algunas verduras. Es una sensación tan enriquecedora cuando recoges cada fruto!.
    La mermelada se ve deliciosa. Yo que no soy de dulces, cuando es así casera y con la fruta ecológica, me la como a cucharadas. Me encanta encima de un yogourt natural sustituyendo el azúcar. Se me hace la boca agua sólo de pensarlo. Un beso Viena. Me ha encantado todo tu post.

    ResponderEliminar
  5. Hola Viena:
    La mermelada tiene un pinta excelente. Yo tambien soy de poner menos azúcar, más o menos como la que ha empleado y no como dicen muchos libros TpT, así queda demasiado dulce.
    Que tenga suerte con el huerto, ya nos irá contando.
    Saludos

    ResponderEliminar
  6. Pero que gozada hija de mi vida, la mermelada de naranja me fascina, es la que compro, eso si siempre amarga; esta tuya me ha convencido bastante... lo del respingo ya ha sido la señal definitiva, no me la pierdo.
    Genial lo de los cajones...
    ***Abrazos y besos !!!

    ResponderEliminar
  7. Puri, buenos días! Me encanta la mermelada de naranja y que tenga tiras de piel le da uun sabor más intenso y especial. Yo también le hecho bastante menos cantidad de azúcar de la que "se recomienda" porquele quita el sabor a la fruta.

    Me alegro que estes contenta con tu regalo de Reyes Magos, seguro que lo aprovechas estupendamente y te darán lindos frutos.

    Muchos besos!

    ResponderEliminar
  8. Gestinionar de ese modo el regalo de Reyes es esplendido. Pues cada vez que un color nuevo decore, los cajones, te acordaras de haber pedido bien este año.
    Sorpresas, gratas sorpresas, eso pedí yo.

    ResponderEliminar
  9. Me ha encantado tu receta de la mermelada de naranja, pero quizás más me han gustado las fotos de tu huerto.... tanto que me quedo en tu cocina, porque ver crecer esas plantas será todo un lujo.

    Besos

    ResponderEliminar
  10. Viena, qué delicia esta mermelada. Las adoro pero nunca las he hecho, con esta me animo. Estuve en Marruecos ahora y probé alguna con esa descripción ue haces de la tuya, adoro los sabores fuertes, el ácido y el amargo, en su justa medida.
    En cuanto a lo que dices del huerto, es magnífico, bellas y sabias palabras. Yo, por vivir en apartamento, he casnalizado mi pasión por las plantas de maceta. De comer, tengo algunas hierbas en la ventana de mi cocina que las adoro, pero cuánto me gustaría tener un huerto, qué gozada.
    Besos

    ResponderEliminar
  11. Qué rica está la mermelada de naranja, me encanta!
    No sé si me animaré a hacerla porque hace unos días que he hecho un montón de mandarinas, pero la verdad es que me tienta mucho, y la idea de sacar un botecito de jalea me parece estupenda.
    Y del huerto lo único que te puedo decir es que tengas mucha suerte y que me da muuucha envidia!
    Un besico.

    ResponderEliminar
  12. Pues sí que es una delicia!!!mermelada casera y con estas naranjas, que buena, y el huerto...me has dejado sin palabras, te noto tan animada que me has alegrado el día. Besos guapa.

    ResponderEliminar
  13. Viena que bonita entrada, esa mermelada con ese color naranja tan brillante, sus etiquetas tan monas... una gozada vamos.

    Y que voy a decir de tu huerto, eres mi ídola, con tu huerta ecológica, reciclando cajones de madera y neumáticos viejos, y disfrutando ya del anticipo del fruto de las semillas.

    Muchos besos y que el año 2011 y los venideros sigas con ese maravilloso espíritu.

    ResponderEliminar
  14. Viena, se me terminó a mi la mermelada de naranja, me encanta y haré tu receta, que buen punto le diste.
    Sobre el huero, espero que te funcione y coseches de todo, es un regalo de la tierra maravilloso.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  15. Viena, magnífica la mermelada, se ve con una textura increíble. Lo del huerto me encanta, no sabes la envidia (sana, eso sí) que me das porque me encantaría poder tener uno pero ya ves en un piso en Madrid como que no, los cajones están estupendos. Mucha suerte y ya veremos los resultados de tan magnífico huerto.
    Me ha encantado este post.
    Un beso.
    Claudia

    ResponderEliminar
  16. Hola preciosa, me encanta todo ese entusiasmo y fuerza que tienes, eres encantadora. La mermelada, (que son dos recetas en una) me encanta, yo tambien soy de mermelada con poco azúcar y la hago de tó lo que pillo, no se si habrás visto mi última de zanahoria morá. Lo de la jalea no se me había ocurrido, suelo dejar a fuego para que reduzca, pero, tienes toda la razón, se disipan las propiedades.
    Veo que te sigue pasando..., lo de dejar comentarios en mi blog. ¿Siempre te ha pasado?, es que hace poco, desde octubre para ser mas concreto, estoy subiendo las fotos mas grande (con más memoria); ¿puede ser por esto?.
    Ya aprovecho para desearte todo un año de felicidad y que sigas con tantas ilusiones,tanto personales y profesionales.
    Besotes, Ángeles.

    ResponderEliminar
  17. Como siento el olor a tierra mojada al leerte....y ese olor me encanta!!.....me conecta, me transporta y me transforma......esta entrada y esta mermelada me ha encantado.....pero tu huerta y su desarrollo me han fascinado.....Abrazotes, Marcela

    ResponderEliminar
  18. No sé qué decir que no hayan dicho ya en los otros comentarios, así que paso directamente a las preguntas, Viena:

    Mi residuo de las navidades son un montón de mandarinas que se están arrugando y una cuantas limas mexicanas (las uso para añadir un chorrito a la papaya -brasileña, es la mejor-; así queda deliciosa). ¿Tú crees que si intento lo mismo que tu describes con mandarinas y limas quedará bien? ¿Y si uso azúcar morena -"cassonade"- en vez de azúcar blanca? ¿Y si pongo sacarina -ya te oigo decir "puajjj"-en vez de azúcar?

    Oye, por herejías que no quede. ¿Te acuerdas de aquel "hit" del 2002, "Aserejé", que prohibieron en Guatemala porque dijo la autoridad que el mensaje de la canción era "a ser hereje"? Pues eso.

    Un besazo

    ResponderEliminar
  19. Mi querida Puri. Así se empieza un buen año, con buenos proyectos. Me parece una pasada lo del huerto. Yo tengo que verlo. A ver si localizo al grupo de vegetas y nos vamos a tomar un tesito contigo. Lo que hagas te saldrá bien, siempre te lo digo. Haces todo con tanto cariño que es imposible que no te salga bien. Un abrazo nuevo sin estrenar.
    Rosa

    ResponderEliminar
  20. Así me gusta la mermelada de naranja, con tropezones y mucha piel.

    De los cajones de cultivo solo te digo que espero ver fotos de cómo se va desarrollando este precioso proyecto.

    Besos,
    Nik

    ResponderEliminar
  21. uaaauuuu eso es una mermelada como dios manda!!!!
    tiene que estar espectacular. te doy la enhorabueaa un saludoo y muchas gracias por compartir estas etupendas recetas y saber hacer...

    ResponderEliminar
  22. Hola querida Viena! la mermelada está..... no sé que palabra usar.. hermosa, divina, es más, ese color que tiene hasta parece que se puede sentir el olor através de la pantalla.

    Me encantó la solución de los cajones, cuando considere tener una huerta en mi jardín, te copio la idea. Yo también tengo mi perrita Roxy, una labrador negra que es cariño pero tremendísima, con decirte que ya se comió un triciclo..

    También te quiero desear un feliz año, lleno de realizaciones.
    un besote
    Gaby

    ResponderEliminar
  23. Viena, a mi papá encantaría esta receta, pues él AMA mermeladas de frutas. A propósito él es español. =)

    Quedó con buenísima pinta y textura!

    Un besazo

    ResponderEliminar
  24. Buenos días CARLOS: Sí que es un problema lo del chopo, además con difíciles soluciones, porque efectivamente las raíces se lo llevan todo por delante. Nosotros tuvimos problemas con un pino que tenemos en la puerta y no queremos cortar, y bueno, hicimos una amplia y profunda zanja, entre el pino y la casa, que revestimos con cemento. Cortamos raíces enormes, con unos nudos tremendos. De momento hace más de 20 años y ha aguantado bien, no hemos vuelto a tener problemas, pero antes o después supongo que el pino ganará su terreno. No sé, para plantar, los cajones parecen buena solución, ya iremos viendo.
    Gracias por tu comentario y tu visita, siempre es un placer.
    Un abrazo.

    JOSE: Cuando te animes, verás que no paras. En general hay una pereza mental para hacer mermeladas, yo creo que nos viene de atrás, cuando hacer mermeladas era muy engorroso, porque se hacían kilos y kilos, pero eso no es necesario, con medio kilo de fruta y media hora, haces una mermelada estupenda para el momento y de esa forma, nunca se tira fruta. A mi me gusta mucho hacerla. Prueba y verás que te va a gustar.
    Un beso.

    HILMAR: conociéndote seguro que tus mermeladas son divinas, siempre pienso que tienes manos mágicas y un gran don en la cocina.
    Gracias por venir a visitarme.
    Un beso.

    ANNA: Te habría encantado esta mañana estar por aquí, trasteando con la tierra. Hemos llenado ya los cajones, los hemos forrado y hemos empezado la faena. Ahora a pensar lo que vamos a plantar. Huele tan bien el huerto ¿verdad?
    Gracias por venir y un beso grande.

    APICIUS: Gracias por su comentario. Totalmente de acuerdo, al final todas las mermeladas saben igual por el exceso de azúcar, incluso hemos hecho en las clases ejercicios de cata a ojos cerrados, con mermeladas compradas y es difícil averiguar qué se come, el azúcar resta todo el sabor. Luego con mermeladas caseras, con estas proporciones de azúcar, al menos las que yo hago, despiertan perfectamente las diferencias, la naranja sabe a naranja y el tomate a tomate. Así es como nos gusta ¿no?
    Un abrazo.

    Querida FE-I KÁ: Esta seguro que te gustaría. Pruébala y me cuentas.
    Un beso y gracias por tu comentario.

    LAURITA: Parece que todos estamos de acuerdo en el tema del azúcar y las mermeladas, eso es la experiencia que nos ha dicho cómo están mejores.
    Gracias por tus palabras. Un beso.

    ALE: Ojalá te llenes de sorpresas si eso es lo que has pedido, pero que sean todas agradables y maravillosas.
    Te va a encantar el huerto elevado, ya verás, hoy hemos puesto la tierra y están preciosos los cajones.
    Un beso.

    ROSALEDA: Bienvenida a este espacio, iré dando novedades de las plantas y desde luego, espero que veas el desarrollo. Para mi es una alegría compartirlo con vosotros.
    Gracias por tus palabras y reitero: sé bienvenida.
    Un beso.

    ResponderEliminar
  25. CLAUDIA H: Compartimos ese gusto ácido-amargo y bueno, en Marruecos son genios en el manejo de los ácidos ¿Has probado los limones en conserva? El año pasado los hice en casa y me encantó la experiencia. Claro que luego teníamos limones para dar y vender, porque se gasta poquito y yo había hecho un montón.
    Te encantaría ver el huerto ahora, está tan bonito, pero mira, cuando te gustan las plantas, hasta una ventana es buen lugar para ver crecer algo de verde. Hay proyectos incluso en miniaturas, y es increible cómo se aprovecha el espacio para tener huerto en cualquier parte.
    Muchas gracias por venir y un beso grande.

    LOLA: Seguro que la mermelada de mandarina estará muy rica. El tema de la jalea siempre lo hago, con la mermelada de tomate también, y hay que ver que al final casi la gastamos antes que las mermeladas, como una miel, es muy utilizable.
    Un beso y muchas gracias por tu visita.

    CATY: querida Caty, qué buen corazón tiene una persona que se alegra el día por ver a otra animada y feliz. Hay que ver cómo eres de generosa. Muchas gracias, porque sé que es de verdad. Un besito muy grande y el huerto, ya lo verás.

    DELIKAT: Suelo decir que soy, que somos en realidad, somos una familia de basurillas, mis hijas han aprendido y de vez en cuando aparece una con "algo" que ha encontrado. Si te contara la de increíbles cosas que hemos encontrado por ahí, tiradas jajaja. Así que somos basurillas de verdad. El huerto ahora presenta un aspecto inmejorable, estoy ilusionada con los cajones de cultivo, pero ya te iré contando, espero que compartamos eso, que va a ser chulo.
    Un beso muy grande.

    KAKO: qué bien que te animes y pruebes esta receta, no te pierdas lo de la jalea, verás que es una buena idea.
    Muchas gracias por tu visita y recibe un abrazo.

    CLAUDIA: Muchas gracias por tus palabras, me alegro de que te guste la idea del huerto, iré compartiendo la experiencia que espero que sea buena y fructífera. Entiendo que en Madrid sea muy difícil, pero como le he dicho a la otra Claudia, hay proyectos que te montan un huerto en lugares increibles, por pequeños e insólitos, así que todo es ponerse y buscar soluciones.
    Un beso grande.

    KESITO: Naturalmente que vi tu mermelada de zanahoria morada y me encantó. Visito a menudo tu blog, pero es verdad que tengo mucha dificultad, antes no me pasaba, navegada por el bien, fluidamente y supongo que tiene mucho que vedr el tamaño de las fotos, yo no entiendo mucho, pero mi hermano me dijo que yo también pongo las fotos muy grandes y eso ocupa mucha memoria, pero no sé si afecta a los que venís por aquí, en tu caso, como tienes además animaciones, cositas muy chulas, que se mueven, etc., creo que eso a los que no tengan equipos muy potentes, les debe afectar. Pero leerte sí te leo, al hacer comentarios es cuando viene el lío.
    Muchas gracias por tus palabras tan amables y cariñosas.
    Un beso grande.

    MARCELA: Qué pena que estemos tan lejos, con lo que me gustaría conocerte en persona y que pudieras venir a ver el huerto y más, muchas más cosas. Gracias por tu siempre grata visita y tus palabras llenas de cariño.
    Un beso.

    ResponderEliminar
  26. SOROKIN: Espera que todavía me estoy riendo, eres tremendo. Me pasas de la concentración para contestar a tus preguntas, a la mueca y el puajj leyendo tus ocurrencias desvirtuadoras, y luego finalmente a la risa, que me parto, con las aserejé jajaja. Por dios Monsieur, qué versatilidad.
    Sí a la primera, No a la segunda y tercera. Para la última, la ola, porque es un arte obtener risas y sonrisas del personal, pero si ya se obtiene carcajada..., lo dicho, monsieur, la ola.
    Un beso.

    ROSA: Me encanta tu abrazo nuevecito, sin estrenar, qué pasada, huele de bien, a cajita de regalo hummm.
    Claro que tienes que verlo, tu y el resto de las vegetas. El otro día vino Elena, tenemos que juntarnos a tomar ese tececito, pero no vengáis a plan, o hacer un paréntesis en las dietas, que ya sabéis que yo hago pastelitos.
    Un beso grande.

    NIK: Claro que verás fotos, espero que de todo el proceso, estoy tan ilusionada que me encanta compartirlo con todos vosotros.
    Un beso grande y gracias por tu visita.

    FREDOCHEF: Bienvenido a este espacio y gracias por tus amables palabras. Me alegro de que te haya gustado la receta de la mermelada.
    Un abrazo.

    GABY querida: Qué alegría me da verte por aquí y además siempre tan cariñosa.
    La verdad es que con perros el huerto se hace difícil, porque son unos trastos, menos mal que los queremos, pero yo he tenido perros que me han costado una fortuna, rompiendo ropa, partes del coche, árboles y los disgustos son diarios. Ahora están más calmados, pero cuando son cachorros un año malo no lo quita nadie.
    Creo que los cajones serán una buena solución, esta mañana estaban no obstante curiosones viendo qué hacíamos con esos cajones, pero no se pueden subir a ellos, creo que es una solución.
    También yo te deseo lo mejor, a ti y a los tuyos. Un beso muy grande.

    ResponderEliminar
  27. TALITA: Qué bien que te haya gustado. Seguro que tu le haces a tu papá mermeladas deliciosas, porque con las manos maravillosas que tienes, no me cabe duda.
    Ya sabía que era español, de ahí supongo que tu manejes bien este idioma. Esto te servirá además para practicar.
    Un beso muy grande y gracias por tu visita.

    ResponderEliminar
  28. Hola guapa!
    Mi huerto también lo compartimos con los animalicos chicos; hace dos años, las tijeretas nos devoraron todas las coles chinas, con la ilusión con las que las planté. Este año, las hormigas, qué tipas, como zampan... en fin, a ver que nos toca este año ya que la huerta la debemos poner en marcha desde cero cada primavera. Ahora dentro de un par de semanas, empiezo con los primeros plantones. Estoy deseando comenzar, la disfruto una barbaridad:-)

    Tu mermelada soberbia!
    Besos

    ResponderEliminar
  29. Rica mermelada y rica aventura la del huerto. La verdad es que no tengo ni idea de plantar y me encanta escuchar el cariño que le tienes a esa tierra.
    Un besote.

    ResponderEliminar
  30. Hola que lindo blog tienes, debe ser muy gratificante después de todos los cuidados que tienes con tú huerto, disfrutar de esa deliciosa mermelada de naranja, se ve deliciosa, saludos.

    ResponderEliminar
  31. Viena que maravilla de mermelada me imagino su sabor sobre un delicoso pan o bollo o bañando un rico chocolate negro.
    Eres una gran afortunada de poseer esa pedazito de tierra.
    Disculpa que llege con retraso
    Un besazo Viena

    ResponderEliminar
  32. ¡Qué delicia! Me encanta aprovechar la fruta de temporada y una buena manera de hacerlo es con mermeladas que podemos disfrutar todo el año.
    Una receta riquísima.

    Besos.

    * Sobre lo que me preguntas del chocolate decirte que uso Milkibar.

    ResponderEliminar
  33. Hola! he llegado a ti de casualidad buscando recetinas de mermeladas, esta de naranja me ha encantado, me la copio y sigo cotilleando en tu cocinita!!! Por cierto, ya tienes una seguidora mas desde zaragoza!!! Besicos enormes!!!


    http://anicaensucocina.blogspot.com/

    ResponderEliminar
  34. Primeramente voy a comentar la mermelada que me pareció buenísima y con una explicación y fotos tan didácticas que el que lo intente tiene el éxito asegurado.
    Luego el proyecto de la huerta, buen trabajo te espera, pero qué satisfacciones te deparará! Voy a estar esperando la secuencia de fotos para ver como va creciendo el proyecto y ver si me animo yo también!
    Besitos

    ResponderEliminar
  35. Hola Puri me alegra saber tu nombre, no sé qué me pasa con tu blog que sigo sin actualizarlo y me pierdo todas las recetas. Me encanta esta mermelada con menos azúcar y lo de sacar la jalea me lo apunto para cuando la haga. Una compañera mía tiene un jardín como el tuyo en un ático aquí en Madrid y le funciona a las mil maravillas espero que tu también lo consigas. Trasmites tanta emoción con las cosas que haces que es un disfrute leerte lo digo de corazón. Un beso y mucha suerte.

    ResponderEliminar
  36. MAI: Finalmente también en eso coincidimos ¿te das cuenta? Un huerto para nosotras y nuestros bichitos jajaja. Pues me gustaría que me vayas contando como van los plantones y lo que plantas y demás. Un beso grande Mai.

    JANTONIO: Gracias por tu visita y comentario. Pues ya verás que si la sigo, vas a aprender de huerto, jejeje, quien sabe, igual un día te animas. Un beso.

    NORMA: Bienvenida al blog y muchas gracias por tu comentario. Un beso.

    MARIA corazón, no tienes que disculparte por nada, todos vamos tan justitos de tiempo, que comprendemos todo. Yo llevo días que paso y leo a los compañeros, sí, pero no tengo más tiempo de comentar, así que tranquila, que no eres la única y nunca llegas tarde. Un beso muy grande.

    SILVIA: GRacias por tu visita y tu respuesta. El Milkibar es el que yo también uso, pero tiene un fundido horrible, espero que no sea algo que yo hago mal, pero siempre me cuesta fundir ese chocolate sin que se seque.
    Un beso y gracias de nuevo.

    ANICA: mañica jejeje, muchas gracias por tus palabras y sé bienvenida a este espacio, en el que espero nos seguiremos viendo a menudo.
    Un beso grande.

    CRIS: sería fantástico que tu también te animaras, te imaginas compartir además de cosas de cocinillas cosas de huertanillas? Gracias por venir a visitarme y recibe un beso grande.

    MORENA: Gracias de verdad por tus palabras tan cariñosas. Sí, es cierto no sé que pasa pero yo tampoco puedo actualizar tu blog, será cosa de alguna incompatibilidad de programas o algo, pero de vez en cuando paso a verte de todas formas, aunque tenga poco tiempo de comentar, te sigo.
    Un beso grande y gracias de nuevo.

    ResponderEliminar
  37. Viena qué envidia me da tu huerto, y sobre todo la alegria que tu desprendes al hablar de él, se nota que lo disfrutas enormente. Yo el año pasado hice unos botecitos de Mermelada de naranja, pero me pasé en el tiempo de cocción y me quedó algo parecido al dulce de membrillo pero con sabor a naranja. Estaba delicioso, pero mermelada mermelada no era. Este año volveré a intentarlo y también haré un poquito de ese invento que me salió de churra, pero eso, también quiero mis tarritos de mermelada. Un beso y enhorabuena por tu huerto. Besos.

    ResponderEliminar
  38. DOMI: Gracias por tu comentario, a veces cuando no nos sale la cosa, nos sale algo mejor es verdad, seguro que ese dulce de naranja estaría buenísimo. La naranja es que espesa muy fácilmente, eso hay que tenerlo en cuenta y cuando enfría más que en caliente.
    Lo dicho, gracias por tu visita y un beso grande.,

    ResponderEliminar
  39. Hola, he visto tú mensaje por lo del google analytics. El código lo he puesto al final del código html, que no lo he puesto en ningún sitio en concreto y me ha funcionado. Si tienes alguna duda pues no dudes en preguntar

    ResponderEliminar
  40. Jose: GRacias por contestarme tan rápido, pero verás es que yo no sé mucho y no sé que es el código html, dónde está eso?

    ResponderEliminar
  41. Ahh, ya ví esto, tú discuparas, es que voy de adelante para atrás y apenas estoy entendiendo el post que sigue a este.

    Yo perros en mi hogar sólo en figurillas de barro: http://www.mesoweb.com/es/recursos/MNA/71.html

    De otro modo nunca de los nunca, imagínate, si tenía una vecina loca con 80 perros enfrente de mi casa anterior.

    Lo que si voy a hacer es a reutilizar un tinaco que ya no sirve para hacer el huerto y que no esté a ras de tierra como dices.

    saludos

    ResponderEliminar
  42. CARMEN: Pobre perritos gordos que se los comían, para mi es impensable, tengo ahora cuatro perros (murió una perrita no hace mucho) y los adoro, dos grandes y dos pequeñas. Tengo también dos gatas y más bichitos, más, adoro a los animales, pero el huerto me lo destrozan con sus patazas, por eso he encontrado la solución en el huerto elevado.
    Y bueno, puedes estar por aquí de adelante hacia atrás, de atrás hacia adelante, de lado, danzando en círculo o como tu quieras, siempre, siempre eres bien recibida y me gusta mucho verte.
    Un besazo.

    ResponderEliminar
  43. Hola Viena, ya te dije hace unos días que pensaba leerme tu blog de principio a fin, hoy ha tocado, entre otras, esta entrada. Mi problema con el huerto es que además de perros y gatos, corren por allí dos yeguas árabes a las que les encanta "lo verde", Pero no es de esto de lo que quería hablarte, tengo una amiga metida hasta la médula en huertos ecológicos y me recomienda un fertilizante hecho con ortigas maceradas en agua, que según dice le está dando muy buen resultado.Si te interesa puedo preguntarle cual es la proporción de unas y otra.

    Y tengo que seguir leyéndote, a ver si resuelvo de una vez por todas mi gran contradicción; me encanta LA COCINA, pero no me gusta cocinar.......Me falta aplomo,me falta algo que ni yo misma se.
    Un beso

    ResponderEliminar
  44. Hola CELIA: Me gustan mucho tus comentarios, los encuentro próximos e interesantes.
    Yo conozco el agua de ortigas, pero siempre lo tengo entendido para combatir las plagas, así es como lo uso, no sé si es fertilizante.
    Yo también tenía una yegua, Lucera se llamaba, el año pasado murió, y sé que les gusta lo verde, ya lo creo.
    No encuentro contradicción en lo que me dices, si te encanta la cocina sólo es cuestión de que veas el cocinar como un taller de percepciones, en donde los colores se ponen delante tuyo a pavonearse a tus ojos, las texturas se dejan acariciar, los sonidos juguetean... En el instante que percibas, y se ve que tienes sensibilidad para ello, en el instante que percibas digo, todo eso que sucede, te convertirás en una gran amante de cocinar, si no, date el tiempo, que de eso yo sé un poco.
    Un beso grande y feliz Año Nuevo.

    ResponderEliminar
  45. Hola Viena, gracias por tus consejos, esperaré, pero de momento La Naturaleza no me ha concedido el don para percibir todas esas sensaciones de las que hablas.
    Y en cuanto a las ortigas, no había oido mal, me confirma mi amiga que el agua de maceración es un buen fitofortificante que ayuda a la formación y mejora del compost. También como tu dices, usado en forma de purín sobre las yemas de los árboles, actua de insecticida.

    Y Lucera.... seguro que tenía, al menos de pequeña, una mancha en forma de estrella sobre su frente, muchos de los potrillos deben su nombre a esa señal. Yo también perdí a Raposo, un semental de ¡33 años!, del que no se si el me dedicó a mi los mejores años de su vida , o yo a él los mios. Un beso y gracias






    Sobre ortigas; he consultado a mi amiga Ana y me dice que no había oido mal, efectivamente el agua de ortigas es un buen fitofortificante

    ResponderEliminar
  46. CELIA: La Naturaleza no te ha negado nada, te lo aseguro, lo que pasa es que todo lo que nos da no lo hemos descubierto todavía. En algún momento lo buscarás o lo descubrirás.
    Lucera tenía esa mancha, es cierto.
    Un beso grande.

    ResponderEliminar
  47. Me gusta tu blog y desearia que lo compartieras con el mio
    si no es un atrevimient.que es...
    http://miscosascotidianascristina.blogspot.com

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Cristina, gracias por tu comentario. Imagino que te refieres con lo de compartir el blog, a que te siga, no se si es así. Yo suelo seguir a quien me sigue, porque me gusta ver lo que hacen mis seguidores y conocerlos, así que no te preocupes que iré por tu blog.
      Un abrazo.

      Eliminar

Publicar un comentario