Me gustan las tartas sin harina, siempre son una excelente opción para las muchas personas a las que no les gustan los bizcochos y además, son tartas más ligeras, tanto en el paladar como en la digestión.
Esta merengada de naranja es una de esas tartas. Además, es de las que yo llamo tartas comodín, porque aprendiendo a hacer una, luego se puede, variando su cobertura, hacer muchas tartas.
Aunque es muy bonita, ni así aparenta lo realmente rica que está cuando se saborea. A mi me recuerda un poco la textura y esa ligereza que tienen los macarons. En definitiva: está buenísima.
Y bueno, quiero hacer un guiño a dos de mis alumnos que la probaron y que sugirieron llamarla como ellos: “La tarta de Jaime y Andrés”. Ya veis que tengo alumnos listos, yo hago la tarta y ellos la prueban y le dan su nombre jejeje.
No, no será tan fácil, chicos, yo creo que la tarta de Jaime y Andrés debe ser una tarta que vosotros elaboréis en equipo. Y eso es lo que os voy a sugerir, además con el compromiso de publicarla si así lo hacéis. Mucho mejor ¿no?
A esta, le daremos vuestro padrinazgo, pero la llamaremos: “Merengada de naranja”.
Vamos allá.
Ingredientes:
Medio litro de nata para montar
5 claras de huevo
Lo primero que haremos es tostar las almendras fileteadas, poniéndolas en una sartén, apenas engrasada, a fuego muy bajo, hasta que estén ligeramente doradas. Con cuidado porque se queman muy fácilmente.
También rallaremos grosamente el chocolate, dejando algunos trozos enteros. Más o menos así
A continuación, montaremos las claras a punto de nieve, agregando el azúcar mientras montamos, a cucharadas, en lluvia y poco a poco.
Una vez que tenemos el merengue, le añadimos la almendra molida con cuidado de no bajar las claras
Agregamos también las almendras laminadas, reservando dos cucharadas para la decoración y el chocolate troceado y rallado del que también reservaremos unas cucharadas.
Y mezclando con cuidado, con movimientos envolventes, conseguiremos una mezcla suave, con sus tropezones
Colocamos en un molde debidamente encamisado y horneamos a fuego muy, muy bajo durante el tiempo necesario para que quede bien seco y dorado. En mi caso, en horno de gas, estuvo más de hora y media.
Desmoldamos y dejamos enfriar totalmente.
Mientras tanto, procedemos a preparar la crema de naranja.
La mermelada de naranja utilizada, es la que suelo hacer por estas fechas con naranjas de mi huerto, naturalmente cultivadas de modo totalmente ecológico.
En esta entrada del blog podéis ver la forma de elaborar esta mermelada que realmente queda deliciosa.
Pues bien, tomamos 300 gramos de esta mermelada y la mezclamos con la nata montada, con suma delicadeza.
Una vez tenemos la mezcla homogénea, pero con sus pedacitos de piel de naranja, extendemos sobre el merengue horneado y cubrimos bien toda la tarta
Entonces esparcimos sobre la superficie las almendras tostadas que reservamos, así como algunas virutas de chocolate.
Y ya tenemos la tarta lista. Si queremos, podemos espolvorear para finalizar, un poquito de azúcar glas.
Es toda una sensación en boca.
Ligera, con esa sutileza de las tartas sin masa
Y con sus deliciosos tropezones de chocolate o almendra
Imperdible
Espero que os animéis a hacerla. ¡Ah! Y me lo contéis.
Un abrazo.
Tiene un aspecto delicioso y con el sabor a naranja tiene que estar riquísima.
ResponderEliminarBuen Fin de Semana!
Buen fin de semana Vino y Miel
EliminarTiene que estar de muerte¡¡¡¡¡¡¡
ResponderEliminarAsí es Montse, pruébala.
EliminarMadre mia que ganas dan de coger un trozo!! :P y que espabilados que son los niños jaja
ResponderEliminarhttp://hoysonrioalespejo.blogspot.com.es/
Justme: jajaja, sí son espabilados, sí. Un beso.
EliminarTiene que estar de pecado, hemos coincidido en postres esponjosos que se deshacen en la boca, me encanta esa sensación. Tiene que estar delicioso. Un abrazo, Clara.
ResponderEliminarYa he visto tu pastel, Clara, tiene una pinta estupenda y es cierto que los pasteles sin harina coinciden en esa livianidad.
EliminarGracias por tu comentario.
Un beso.
Tiene una pinta buenísimaaa!
ResponderEliminarViena, qué manos tienes!
Un abrazo,
Aurélie
Muchas gracias Aurélie, lo mejor de todo es que no es difícil de hacer, así que no me cabe duda de que también tus manos son estupendas para probarlo.
EliminarUn beso.
Todas tus tartas tienen un aspecto delicioso, y además unas mezclas que mientras vas viendo el paso a paso se te va haciendo la boca agua. Yo ya sabes que no soy mucho de los dulces, pero a una porción de algo tan delicadamente mezclado y con todos los componentes naturales y caseros no me podría resistir. Besos y buen fín de semana.
ResponderEliminarQuerida Anna, por fin acabo de escribirte un correo, ya era hora.
EliminarDices que no eres de dulce, pero será que no eres muy golosa, porque tus recetas de dulces son espectaculares siempre.
Me alegra verte por aquí, siempre me alegra.
Un beso grande.
Ohh Viena que rica!!! si es que estaba viendo la porción y no sabes con que ganas atravesaría la pantalla, la combinación de sabores es perfecta, chocolate, naranja, almendras.... la mermelada casera (me gustan todas)ya no las compro más, no tienen nada que ver, bueno omo todo lo casero. Una tarta impresionante que probaré seguro.
ResponderEliminarUn beso grande.
Claudia
Gracias Claudia por tu comentario. Seguro que te gustará, es una tarta muy rica. Y tienes razón, las mermeladas que venden es que no tienen nada que ver con las caseras.
EliminarUn beso.
Por favor, que delicia!
ResponderEliminarSiempre me ha gustado el nombre "merengado", me suena como suavecito, riquísimo!.
Tengo que tratar de hacerla, gracias por la receta.
Bss.
Kako, es cierto que los nombres nos evocan cualidades y merengado es como dices: suavecito, ondulado ¿A que si?
EliminarIntenta hacerla, no es difícil y el resultado es muy rico.
Un beso y gracias por tu visita.
Viena.....al fin volviste!!.....habia leido tu tarta pero no habia podido sentarme como me gusta.....a escribir tranquila contigo....sin duda una torta deliciosa...ya la guardo porque naranja con chocolate me encanta.....pero al leerte me doy cuenta que estas alegre.....feliz de estar de vuelta en lotuyo....con tus alumnos.....yo ando loca casi sin tiempo porque estare de viaje 1 mes.....y 2 dias en Madrid....hicimos lo posible para pasar por Alicante.....pero el tiempo escaso no lo permitio....de hecho no teniamos que ir Madrid....pero para conocer en persona a algunos amigos blogueros lo haremos.....espero se repita la oprtunidad de volver a Espana.....ese mate contigo no me lo pierdo!..........Abrazotes, Marcela
ResponderEliminarMarcela no me puedo creer que desde tan lejos vengas hasta Madrid y no nos vayamos a conocer, dime cuando vienes, los blogueros madrileños están de suerte. Con lo que me gustaria a mi poder compartir un mate o lo que sea contigo. ¿no podrias arreglarlo? Hablamos. Un beso.
EliminarHola mi niña dulce ...que alegría ver que andas por la cocina y.... con las manos en la-s masa-s.
ResponderEliminarBueno, tu tarta es de esas que se tienen que comer en el cielo de los pasteleros buenos ...tendré que hacerla para estar un ratito levitando de placer placentero.
Eres una artista hija de mi vida.
Besikos y que tengas un feliz y bello día primaveral.
Querida Fe, llegas como las hadas vaporosas, alegres, divertidas. Un rayo de luces de colores. Muchas gracias por tu visita siempre es un placer.
EliminarUn beso redondito.
Con estos deliciosos ingredientes, a ver quien dice que no quiere.
ResponderEliminarUn beso.
Jajaja Irmina, desde luego, yo no digo que no. Cuando tengo tarta de esta en casa, no paro hasta que queda.
EliminarUn beso.
Me estoy imaginando los sabores de esta tarta, pero como me gustan más las realidades, creo que la haré, o al menos intentaré hacerla.
ResponderEliminarPara secar el merengue suelo poner el horno alrededor de los 60º C, hasta que quede al punto.
Esta tarta tiene la dificultad del secado del merengue, pero creo que será solventado.
Ya publicaré mis resultados.
Saludos
Me encataría Apicius que la hiciera usted y nos lo contara. Yo hago el merengue en horno de gas y al mínimo que puedo, calculo que serán unos 100 grados no menos. Para usted no será ninguna dificultad, seguro.
EliminarEstoy impaciente por verlo.
GRacias por su comentario y un abrazo.
Qué rica esta merengada bien fresquita, es sencilla y el resultado un triunfo seguro. El que no lleve harina le hace diferente, sin duda. Un saludo.
ResponderEliminarCarlos, es cierto que es diferente, más ligera de comer y de digerir. A mi me gustan mucho este tipo de tartas y la crema puede ser al gusto.
EliminarUn abrazo y gracias por venir.
Una tarta riuísima, también hacemos mermeladas en casa, nos quedamos por tu blog.
ResponderEliminarBesitos
Bienvenida Anmar y gracias por tu comentario. Las mermeladas caseras son realmente mejores que las industriales, vamos, que no tienen nada que ver.
EliminarUn abrazo.
Viena , me parece buenisima ésta tarta ! ay ! la foto de la cuchara ...!
ResponderEliminarBesitosss.
Gracias Golonsegus, a ver si te animas y la haces.
EliminarUn beso.
Puedo corroborar y corroboro que esa tarta es un escándalo al paladar: la naranja, el merengue, la nata, el chocolate, las almendras... Todo se funde en la boca para conseguir un delicioso bocado. Algún día la haré, porque la combinación de base de almendras y claras me ha entusiasmado, y todo lo demás...
ResponderEliminarPero no me olvido de la Lawrence...ayer hubiera matado por un trozo de Lawrence, ¡qué antojo de chocolate tenía!
Un beso muy grande.
Jajaja Laurita, si pareces un político pudiendo corroborar y corroborando jajaja. Me ha hecho gracia lo de la Lawrence, porque es una tarta que nos pasa a más gente eso de apetecernos un trozo con ansia. Debe ser el chocolate y su adicción.
EliminarUn besito Laura y anímate, la Lawrence se hace fácil y dura mucho tiempo sin nevera y en perfectas condiciones. Yo no la hago más porque me la como jejeje.
Un beso más.
¡Menuda pinta tan irresistible! Yo de pequeña siempre decía que no me gustaban las tartas con bizcocho... era de esas que la harina cero en las tartas, como tú. Esta estoy segura de que sería mi placer máximo, se me está cayendo la baba sólo con verla.
ResponderEliminarBesotes
Hola Miss Migas: Anímate a hacerla que es fácil relativamente y está riquísima, sobre todo eso, si no te gustan las tartas con bizcochos.
EliminarUn abrazo.
Hola Viena:
ResponderEliminarNo me acuerdo de si llegué a dejarte un comentario cuando leí esta receta pero me parece deliciosa y tengo en casa a un amante del chocolate y naranja que estaría encantado!!
Te he dejado una sorpresa en el blog, pásate a verla cuando puedas.
Un abrazo,
Aurélie
Aurelie: Sí me habías dejado ya un comentario, por el y por este, te agradezco mucho. Como también te doy mil gracias por el regalo que me has dejado en tu blog. Ha sido todo un detalle.
EliminarUn beso grande
Pero qué derroche, qué indecoro, qué desmesura.
ResponderEliminarYo me voy a otro lado a rascarme el hambre. Los postres de merengues son mi perdición Viena. Cómo me encantaría ser tu alumna.
un beso
Jajaja Carmen, tienes toda la razón, es totalmente un indecoro jajaja. A mi también me encantaría ser tu alumna, tu profe o lo que sea. De momento, también disfruto mucho con ser tu amiga.
EliminarUn beso.
Ah, Viena, qué delicia todas esas texturas y sabores combinados, almendras, naranja, chocolate… supongo que la combinación crujiente de la base y suave del merengue debe ser la locura-
ResponderEliminarAbrazos
Algo así Claudia, una locura parece un buen punto jejeje. A ver si un día podemos coincidir y puedo ofrecerte a probar una de mis tartas.
EliminarUn beso.
Hola, Viena! Es la primera vez que te escribo, aunque no es la primera vez que visito tu blog.
ResponderEliminarMe parece que somos "paisanas", lo que no sé si del mismo pueblo (ya sería mucha casualidad) o de pueblos vecinos.
El caso es que me encanta lo que haces, pero esta receta me ha gustado especialmente porque, al no llevar harinas, es sin gluten, mundo en el que estoy sumida desde que a mi hijo le detectaron la celiaquía hace 4 años. Por él y para él mi blog de recetas sin gluten. Seguro que pronto verás en él esta u otras recetas tuyas que pueda adaptar para que la puedan disfrutar los celíacos. (Ya te avisaré). Gracias por compartirlas. :)
Te mando un abrazo.
Raquel.
Hola Raquel: Yo soy de Orihuela aunque vivo en Alicante hace ya más de treinta años, pero mis padres y hermanos y todas mis raíces están en Orihuela, incluidas claro está, las raíces gastronómicas.
ResponderEliminarMe alegro de que te guste esta tarta, a mi me gusta cocinar sin harina, así que tendrás algunas cosas por el blog que te podrán servir.
Admiro el esfuerzo que hacéis las mamis sin gluten. Si en algo te puedo ayudar, dímelo.
Un abrazo.
Gracias por el ofrecimiento! Pues al final somos "vecinas" (soy de Callosa).
EliminarAhora mismo entraba en tu blog para ver tu receta de tortas de calabaza, ya que tengo una receta pero es de mi abuela y va por "tazones", y no tengo tazones, así que prefiero medidas más exactas. Intuyo que más o menos deben ser medidas aproximadas a las tuyas, así que como no tengo duda de que tus tortas salen exquisitas, voy a coger tu receta, con tu permiso, para intentar adaptarla al mundo sin gluten. Sé que va a ser una adaptación difícil, como cualquier receta de masa panificable sin gluten. Tengo que dar con la combinación exacta de harinas y eso en este tipo de masas es complicado. Ya te diré qué resulta.
Estamos en contacto. Un abrazo.
Raquel.
Desde luego Raquel que va a ser difícil, pero seguro que con tu experiencia en estas sustituciones lo consigues. Si es así, me gustaría ver el resultado y experimentar a cocinar estas tortas sin gluten. Ya me contarás.
EliminarUn beso grande.