Ya son ocho años dando la bienvenida a los nuevos y a veces no tan nuevos alumnos, cuando llega Octubre y afrontamos el inicio del curso.
Ocho años escuchando vuestras impresiones, aprendiendo de vosotros, de vuestro propio aprendizaje aquí en la escuela.
He estado pensando en ello y me ha llamado la atención algo en lo que coincidís muchos de vosotros cuando pasan dos o tres meses viniendo a las clases:
¡He perdido el miedo a la cocina! Decís.
Y es cierto, justo es eso lo que os pasa a la mayoría, yo también lo percibo con claridad.
Llegáis aquí buscando las instrucciones, con la inseguridad y las dudas de no saber seguirlas. Tenéis miedo a salir del guión, porque pensáis que el guión es perfecto y que es vuestra imperfección la que os impide cocinar tan bien como queréis. Creéis que la cocina es un mundo complejo y aunque os gusta mucho y por eso estáis aquí, creéis que es más difícil de lo que en realidad comprobáis después.
En unos pocos meses, las recetas de clase quedan en el laboratorio como fórmulas ya usadas y dominadas y entonces comienza vuestra verdadera aventura descubridora. Muchas veces en Internet, veis un plato y os lanzáis a hacerlo, otras veces con libros o recetas que os pasan de aquí y allá.
Algunos tenéis la suerte de contar con una madre o incluso una abuela cocinera y entonces vais a pedirle sus recetas, esas que os gustaban tanto de pequeños. Descubrís también el placer de cocinar con otros y os juntáis con amigos o reclamáis que hagamos algún curso de esto o lo otro. Aprendéis a tirar lo que ha salido mal y a que no pase nada. Y todo eso mientras vais perfeccionando clase a clase, añadiendo experiencia, destreza y creatividad.
Es el momento en el que habéis perdido el miedo. Al final la cocina es, como siempre os digo: cortar, pesar, mezclar, batir, mover… Dejar que sucedan cosas y ser un atento observador de las mismas. Y todo eso ya lo domináis, han bastado unos pocos encuentros para sentiros cómodos con las salsas y saber lo que es un chorro de aceite o una brunoise muy fina, para distinguir entre una nata para montar y una para cocinar o para saber a qué fuego han de cocer las cosas.
¿Y ahora qué? ¿Qué es lo que viene después del miedo?
Pues de eso es de lo que trata este Octavo Curso, de lo que viene después del miedo. Este curso vamos a divertirnos a base de bien.
Como la mayoría sois veteranos, es a vosotros a quienes me dirijo principalmente. Este año nos vamos a divertir y vamos a ir a por todas: técnicas, presentaciones chulas, incursiones en la cocina que nunca hemos experimentado, ingredientes raros, nuevos… Todo eso es el juego de después del miedo.
Y para los nuevos, esos pocos que venís por primera vez a clase, sabiendo mucho o poco de cocina, tranquilos, que como ya he dicho antes, es cuestión de un par de meses y os vamos a llevar de la mano para que aún estas primeras clases, sean un verdadero deleite que os llene y que salga a su vez, de vosotros.
Y es que esa es la cocina que yo entiendo, la única que considero viable para ser rescatada de este tiempo de prisas y banalidades que nos ha tocado vivir.
Sólo una cocina generosa, que regala desde dentro porque es feliz para regalar, seguirá teniendo su lugar privilegiado en nuestro mundo, haciendo cultura.
Un trocito de eso, lo haremos juntos un año más.
Gracias por estar conmigo.
Alicante, Octubre 2014
Me encantaría poder participar, Viena. Me tendré que conformar con hacer mis chapucillas cuando lea tus recetas. Qué bien que se lo van a pasar tus chicos.
ResponderEliminarBesazos
Querido Sorokin, y a mi me encantaría también tenerte por aquí un día a la semana, compartiendo todo eso que compartimos en las clases y que créeme, es algo más que cocina.
EliminarGracias por tu comentario. Un beso
Aaaaissss que ya no me aguanto las ganasssss
ResponderEliminarYo también estoy ya ansiosa Nati. Pero ya está ahí, en nada nos vemos. Besos y gracias por tu comentario, que se agradece eh? Sé que me leéis, pero os cuesta comentar jajaja.
EliminarUn beso gordo
Disfrutaría enormemente siendo tu alumna, ya lo sabes, qué pena que nos distancien los kilómetros. Tus alumnos, un año más vivirán hipnotizados de tus dulces palabras y quehaceres en la cocina.
ResponderEliminarMe encanta el cambio del blog, es muy muy elegante, preciosa cabecera!
Un besazo!
Muchas gracias Laurita, yo también disfrutaría contigo y seguro que me enseñarías tanto o más que yo a ti.
Eliminar¿Te gusta el nuevo look? A mi siempre me cuesta acostumbrarme al cambio.
Un beso grande.
Que suerte tienen sus alumnos el tener una Profesora tan dedicada, tan entendida y tan buena comunicadora. Suerte a todos y como dice Viena en su post, cuanto antes pierdan el miedo, antes empezaran a crear sus versiones de los platos y a la vez disfrutaran en la cocina y en la mesa.
ResponderEliminarQue pasen un buen curso a pesar del gobierno.
Saludos
Buenas tardes Apicius. La verdad es que soy yo la que se siente con suerte de poder dedicarme a esto, porque me lo paso bien y creo que en eso radica que a todos nos gusten tanto las clases, a mis alumnos y a mi.
EliminarMuchas gracias por su comentario y que pase un feliz fin de semana.
Puri que ya estamos ahí!!!!!! Yo también tengo muchas muchas ganas. Gracias por todo me encanta tu blog
ResponderEliminarLoreto que alegría verte por aquí y que ganas tengo de verte ya en directo. Nos queda nada, el jueves estamos en el ajo.
ResponderEliminarUn beso grandote y gracias por el comentario.
Este artículo describe perfectamente lo que el alumno siente , un placer haber realizado el primer año, seguimos el que viene. Saludos .
ResponderEliminar¡Ah Danielo! Qué alegría que te sientas identificado con lo escrito aquí, porque eso significa que la comunicación entre vosotros y yo funciona y yo creo que funciona perfectamente. Por eso lo pasamos bien aprendiendo, vosotros y yo. Soy la primera en aprender con vosotros en cada clase, por eso este trabajo no deja de fascinarme.
EliminarUn beso y gracias por tu comentario.