Otro clásico griego, un pastel de espinacas llamado spanakopita, que es también muy fácil de elaborar y que está muy bueno, pero que muy bueno de verdad. Vamos, que no os lo perdáis si como a mí, os gustan las verduras.
Mientras tanto, esperaremos a ver qué tiene que decir el pueblo griego, tan maltrecho en estos tiempos, y que es el que más y mejor derecho tiene a decidir.
Por aquí, 35 grados de un calor húmedo que te recluye en casa. Malos días para la celebración de la primera edición del Mercado Gastronómada de Alicante. Por lo que me han contado, muchísima gente ayer tarde, primer día del evento. Hoy un calor tan asfixiante, que no se puede estar en la plaza Séneca que es donde se han ubicado las vistosas caravanas gastronómicas. En fin, que a ver si hay suerte en lo que queda y resulta un éxito, sobre todo para que prospere como idea.
Y hablando de ideas y de pueblo, a ver si algo cae a nuestro favor, que no parece que tengamos la menor suerte y ya nos toca (en vigor la ley mordaza).
Bueno, vamos con la receta que veréis que os va a gustar.
Ingredientes:
Medio kilo de espinacas frescas y tiernas
Dos huevos
200g. de mantequilla
Una cebolla
Un paquete de pasta filo
Sal, pimienta, perejil, nuez moscada
Aceite de oliva virgen extra (se me escapó en la foto)
Para la bechamel:
Medio litro de leche
35g. de harina
40g. de mantequilla
Sal
Vamos allá:
Primero prepararemos una bechamel, poniendo a fundir la mantequilla en una cazuela, a fuego muy lento
Una vez fundida, añadimos la harina y la rehogamos en la grasa, removiendo y añadiendo muy poco a poco la leche, sin dejar de remover.
Cuando ya hemos incorporado toda la leche, añadimos una pizca de sal y cocinar sin dejar de remover durante al menos 10 minutos.
Obtendremos una bechamel suave y sin grumos.
Ahora procedemos con el pastel.
Cocemos las espinacas en una cacerola amplia, con apenas un dedito de agua, durante 10 minutos. Escurrimos bien.
Por otra parte, cortamos la cebolla en brunoise y la salteamos con un poco de aceite de oliva virgen extra
Cuando la cebolla transparenta, añadimos las espinacas escurridas y mezclamos bien
Mezclamos también con los huevos batidos. Salpimentamos y añadimos nuez moscada a nuestro gusto, así como un toque de perejil.
Por último incorporamos a la mezcla la bechamel que teníamos reservada
Y tenemos listo el relleno para el pastel.
Ahora tomamos la mantequilla fundida y pintamos con cuidado una por una, hasta cuatro hojas de pasta filo que pondremos sobre un molde a nuestro gusto, superpuestas hoja a hoja.
Una vez las cuatro hojas engrasadas sobre el molde, echamos el relleno repartiendo bien
Y entonces, cerramos las hojas de pasta, envolviendo el pastel.
Pintamos con mantequilla fundida otro par de hojas, juntas y cubrimos el pastel, cerrando bien por todas partes. Remetiendo hacia los lados.
El número de láminas de pasta es al gusto de cada cual. Pueden ser cuatro o las que queráis, siempre y cuando las engraséis una por una antes de pegarlas.
Y ya está, sólo nos queda pintar la superficie e introducir en el horno a fuego medio (180º), hasta que veamos que la pasta está ligeramente dorada.
En caliente, la textura será jugosa y muy tierna. Pero también se puede tomar frío, con una textura más compacta. En ambos casos, perfecto al paladar.
Imperdible.
Nos vemos pronto amigos. Sea como sea, algo se mueve.
“Y desfallecientes ahora los míseros Lares,
Se esconden en el fondo del larario,
Se empujan unos a otros y tropiezan,
Y un pequeño dios cae sobre el otro,
Pues han comprendido qué clase de ruido es éste,
Han percibido ya los pasos de las Furias.”
Kavafis. Los pasos (Fragmento)
Hola, Viena. Cómo estás? Me encanta la propuesta que nos traés y me encanta leerte porque sabés cómo engarzar la vida misma en un continuo que nos llama a reflexionar, siempre.
ResponderEliminarMuchos años atrás preparaba la tarta de acelga de alguna manera similar a esta, por la salsa blanca/bechamel, sobre todo. Al ver tu receta recordé que llevo años sin hacerla y no creo que mis niños la hayan probado. Claro que tu versión, tan griega y exquisita, es superadora en todo sentido. Tendría que ver si pudiese conseguir la masa philo como para hacerla lo más parecido que se pueda a la original.
Ya te contaré si la hago, aunque ciertamente y a fuerza de verdad debería aprovechar el frío que tenemos por estos días (temperaturas bajo cero de esta mañana contra el calor agobiante de tu Alicante) e intentar el repollo relleno que fue el que me depositó en tu maravillosa cocina. Recibe mi gratitud.
Muchas gracias Silvia, tus palabras si que son todo un regalo. Seguro que tu receta de acelgas es riquísima, de hecho, yo casi prefiero las acelgas a las espinacas. Pero si consigues la masa filo, verás que el contraste tan crujiente de la superficie con la jugosidad del relleno es una maravilla.
EliminarClaro que para esos fríos, uuuuauuu, la col rellena te la aconsejo sin duda.
Un abrazo
Tiene una pinta deliciosa, me ha gustado mucho ya que me encantan las verduras preparadas de cualquier forma que exista jejeje, asi que me apunto tu recetita, besitos y buen fin de semana.
ResponderEliminargracias Libertad y también un feliz fin de semana para ti. Prueba esta receta y verás que es bien rica.
EliminarUn beso.
OXI a la Troika. ΝAI a Sabores de Viena. La luz se come, no hay más entrar en este blog para comprobarlo.
ResponderEliminarUn plato para degustar mañana. Salud!
Loam, eres tan generosa con tus comentarios como siempre. Gracias por venir a darme ese poco de tu tiempo, tan lleno y tan amable.
EliminarUn abrazo
Maravilloso pastel para acompañar al maravilloso resultado de la votación :)
ResponderEliminarOXI OXI OXI and fuck the troika
Así es Ana, estamos de celebración, aunque espero que no nos agüen la fiesta. Los animales heridos son peligrosos.
EliminarGracias portu visita y comentario. Un abrazo
Hola Viena, acbo de conocer tu blog y te felicito tienes muy buenas recetas. Voy a preparar este plato si consigo una buena masa philo, tienes razón la diferencia del crujiente del exterior con la suavidad del interior es algo que debe resultar delicioso. Hasta prono, un beso
ResponderEliminarBienvenida Pilar y gracias por tus palabras con el blog. Si consigues la pasta filo, prueba y verás que te va a gustar la receta.
EliminarUn abrazo
Hice tu pastel a primeros de agosto y me encantó el resultado. Hoy lo repito con una vecina que lo probó y que le gustó mucho también. Hice una pequeña modificacion - ampliación de la receta y es que le añadí queso feta y te aseguro que estaba buenísima. Ya te avisaré cuando lo publique en mi blog.
ResponderEliminarQuerida Raquel, gracias por contarnos tus aportaciones a la receta, la probaré así la próxima vez que la haga. Me alegro de que te gustara, siempre es una alegría saber que alguien hace las recetas del blog.
EliminarUn abrazo