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Pulpo y boniato en cataplana

 


Si hay algo que me ha quedado claro en estos 16 años al frente de nuestra escuela de cocina, es que los mejores platos siempre han resultado ser los que reunían estas cualidades: ser sencillos, rápidos y originales.

Por supuesto no nos olvidemos de que resulten ser exquisitos, primera regla de la cocina.

Y bien, la receta que hoy os traigo tiene estas cualidades y muchas más: es un guiso bonito, es saludable, está que te mueres, vale lo mismo para invierno que para verano, es un plato maravilloso y si creéis que exagero, os invito a que lo hagáis y lo comprobéis.


También es verdad que hacerlo en la cataplana tiene todo su encanto y sin duda, un efecto que contribuye a lo extraordinario del guiso.



La cataplana es este utensilio típico de la cocina portuguesa, con forma de concha cerrada, en donde se guisan unos platos espectaculares.

El principio de la cocción en este recipiente, es el mismo que el de los tajines africanos, es decir, una tapa en forma de cúpula que condensa los jugos de los alimentos, devolviéndolos al recipiente y haciendo que las cosas se guisen en su jugo, con un sabor intenso y estupendo.

Y bueno, pocas más explicaciones requiere esta receta y como veréis a continuación, también pocas instrucciones, porque es una receta realmente fácil de elaborar y rápida.

Vamos a ello:

Ingredientes:

Unos 500g. de pulpo cocido (Yo he usado patas que venden envasadas al vacío)
Un boniato anaranjado
Un pimiento verde
Media cebolla
Dos o tres dientes de ajo
Una hoja de laurel
Medio vaso de vino blanco seco
Aceite de oliva virgen extra
Una cucharada de pimentón agridulce (es algo picante)
Algunas hierbas a vuestro gusto. En mi caso: tomillo, romero y cilantro en polvo.
Unas escamas de sal


Y comenzamos:

1.-Hervimos el boniato lo suficiente para que esté tierno, pero sin que se deshaga y lo cortamos en rodajas gruesas.


2.- Cortamos el pulpo en trocitos de bocado.


Y cortamos la cebolla y el pimiento en juliana y los ajos en láminas.


Una vez tenemos esto, procedemos a guisar.

Colocamos un fondo de aceite en la cataplana y pochamos la cebolla, los ajos y el pimiento. Añadimos también la hoja de laurel y dejamos cocer durante unos cinco minutos


Luego añadimos el vino y dejamos que evapore durante un par de minutos más.

Colocamos los trozos de boniato y el pulpo y condimentamos con las hierbas y especias.




Cerramos la cataplana y la dejamos a fuego medio/lento durante 10 minutos.


Y ya está. No os lo creéis lo fácil que es y lo divino que está este plato.


Y dan ganas de comérselo ahí mismo, dentro de la cataplana. 

Aunque se luce de maravilla sobre un plato negro. Ese anaranjado del boniato y el morado del pulpo, quedan geniales. ¿No creéis?  


Espero que lo disfrutéis este verano. Ah y si no tenéis cataplana, pues podéis hacerlo en un tajine o en una cazuela de caña alta, no será exactamente igual, pero os valdrá, seguro que sí.



Os abrazo amigos.



















Comentarios

  1. ¡Dios mío, apenas he leído la mitad de la receta y ya estaba salivando!

    Ya mismo me hago con una cataplana.

    Gracias, Viena. Abrazos también para ti.

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    Respuestas
    1. Muy bien Loam, jajaja es la respuesta genial de alguien a quien le gusta la cocina y la buena mesa.
      Prueba este guiso si tienes oportunidad porque te aseguro que es divino. Y cuéntamelo, claro.
      Un abrazo.

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  2. Bueno, salí como anónimo, será que me estoy desapareciendo? ;-)

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    Respuestas
    1. De anónimo nada, Viena, tu personalidad y tu firma están bien presentes en todo cuanto escribes. Así que: Viena 10 / la máquina 0.

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